El hogar, a la entrada de las cuevas


Un reciente estudio en la Cova de las Teixoneres (Cueva de las Tejoneras, Moia, Barcelona) concluye que los campamentos neandertales que allí se establecían lo hicieron regularmente, en lapsos temporales relativamente cortos y con la misma estructura habitacional durante, al menos, los 7.000 años comprendidos en el estrato analizado.

El trabajo se ha llevado a cabo examinando la distribución espacial de unos 39.000 restos arqueo-paleontológicos y 6.000 bloques naturales de caliza, correspondientes a la Unidad III del yacimiento, datada entre 51.000 y 44.200 años de antigüedad. En su inicio, esta etapa estuvo marcada climáticamente por un periodo frío y húmedo, con cambios progresivos a temperaturas más cálidas y más humedad, volviendo finalmente hacia otra fase fría y árida al final del depósito.

El análisis de la distribución espacial de los instrumentos líticos, los restos de los animales consumidos, la disposición de las piedras y los restos de hogares demuestran que las ocupaciones neandertales siempre situaban el hogar a la entrada de la cavidad —asegurándose cobijo, pero también aire fresco— en sus múltiples visitas a la cueva, las cuales podían ser de una noche, de varios días o incluso de varias semanas.

En el estudio, publicado recientemente en Scientific Reports, han participado cinco investigadores del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES - CERCA), entre los que destaca Jordi Rosell, director de las excavaciones y miembro también del Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA). Además, han colaborado otros científicos de España, así como de Francia, Alemania, Australia, Argentina y Estados Unidos.

Referencia:

Zilio, L., et al., 2021. Examining Neanderthal and carnivore occupations of Teixoneres Cave (Moià, Barcelona, Spain) using archaeostratigraphic and intra-site spatial analysis. Scientific Reports 11, 4339. DOI: https://doi.org/10.1038/s41598-021-83741-9