Una de las aportaciones de los yacimientos de la sierra de Atapuerca al conocimiento sobre nuestros orígenes y sobre el nacimiento del comportamiento humano tal y como lo conocemos nace de una pequeña cavidad de la Sierra. La Sima de los Huesos ha proporcionado hasta la fecha una cuantiosa colección de fósiles humanos de hace casi medio millón de años de antigüedad (periodo geológico Pleistoceno medio). Gracias a los trabajos que durante décadas han realizado los miembros del Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA) en esa zona, se sabe que estos humanos del linaje neandertal cuidaban de sus enfermos, contaban con los elementos anatómicos compatibles con una capacidad de audición y lenguaje similar a la nuestra y, como si de nuestro reflejo se tratase, también tenían conflictos que en ocasiones acababan en actos violentos letales. Además, todas las líneas de evidencia desenterradas verano tras verano en el suelo arcilloso de la Sima sugieren que los 29 individuos que allí permanecen desde hace 430.000 años no llegaron por su propio pie, sino que alguien arrojó sus cadáveres por la chimenea vertical que da acceso a esta extraordinaria cámara subterránea. Durante décadas se ha discutido el significado de esta conducta, si se trata de un comportamiento funerario simbólico, tal y como se ha sugerido que indicaría el bifaz Excalibur asociado a los restos fósiles, o si, por el contrario, puede ser una práctica mortuoria sin ningún tipo de connotación ritual o cultural. La Sima de los Huesos se ha convertido así en una oportunidad sin precedentes de rastrear el origen del comportamiento funerario (o cultura de la muerte) en el linaje humano. Tal y como sucede en ciencia, para poder llegar más allá en las interpretaciones e hipótesis planteadas, hay que seguir investigando mediante nuevas metodologías, buscar nuevas líneas de evidencia y rastrear paralelos en otros lugares que permitan contar con datos de comparativa.
¿La Sima de los Huesos representaría la primera evidencia irrefutable de la cultura de la muerte? Si se pudiera aceptar esta hipótesis, ¿sería el único caso en el registro europeo del Pleistoceno medio? ¿Cómo se ha manifestado este comportamiento en el tiempo y en el espacio por parte de neandertales y humanos modernos del Paleolítico? Para poder llevar a cabo tan compleja y ambiciosa investigación, hace falta contar con un amplio equipo de académicos, e invertir en recursos materiales que permitan abordar el análisis de la mayor parte del registro paleoantropológico europeo desde diferentes disciplinas que incluyen análisis tafonómicos, reconstrucciones virtuales para exámenes forenses, estudio de patrones de distribución espacial, la relación global de diferentes yacimientos y modelos matemáticos para interconectar el amplio espectro de datos recopilados.
La Unión Europea ofrece anualmente unas convocatorias altamente competitivas del Consejo Europeo de Investigación (ERC por sus siglas en inglés) que están diseñadas para financiar proyectos de investigación científica de excelencia en la frontera del conocimiento. En concreto, las subvenciones iniciales (Starting Grant) están dotadas con 1,5 millones de euros para apoyar ideas lideradas por aquellos que se encuentran en las primeras etapas de su carrera científica. En la convocatoria de 2020, Nohemi Sala, del equipo de investigación de la Sima de los Huesos, concurrió con la propuesta titulada “DEATHREVOL: las raíces y la evolución de la cultura de la muerte. Una investigación tafonómica del registro paleolítico europeo”.
DEATHREVOL ha sido uno de los 23 proyectos españoles seleccionados en esta convocatoria ERC-Starting Grant 2020, constituyendo el único español de su modalidad (estudios del pasado humano). Durante los próximos cinco años (entre 2021 y 2026) se va a desarrollar esta investigación, que cuenta con 1,5 millones de euros de financiación, por parte de un nutrido equipo del EIA involucrado en las indagaciones de la Sima de los Huesos de diversas instituciones tales como el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), Centro Mixto UCM-ISCIII de Evolución y Comportamiento Humanos, Universidad de Alcalá, Universidad del País Vasco, Universidad de Burgos y el Instituto Catalán de Paleocología Humana y Evolución Social (IPHES). El futuro aguarda con nuevas respuestas a antiguas preguntas y un camino lleno de nuevas cuestiones sobre nuestros orígenes. Tal y como escribió Darwin en El origen de las especies, “in the future I see open fields for far more important researches” (en el porvenir veo campos abiertos para investigaciones mucho más interesantes).
Enlace a la página web del Consejo Europeo de Investigación sobre DEATHREVOL: https://cordis.europa.eu/project/id/949330/es